10 de junio de 2010

Alguien felizmente triste ...




De la tristeza
un mundo maravilloso.
La libertad:
limitada por la moral,
Y una realidad:
que no valen el sacrificio.
Un “tal vez”:
tal vez seria seguro.
De lo que uno desea oír,
oiría lo contrario.
El sexo:
juego entretenido.
El contacto primario,
sobra al deseo.
Deseaba morir,
La razón a eso:
la peste ajena.
Consecuencia:

Alguien felizmente triste.


Autora: Romina Munafó